jueves, 18 de abril de 2013

Un duende muy andarín



En la zona del Moncayo ya sabemos que hay un gran número de duendes habitando en ella. Su principal cometido es el vigilar los montes y bosques y proteger a los animales que allí viven. Cuando paseas por esa zona no es extraño el encontrarte con una diversidad de animales. Se pueden ver facilmente corzos, buitres perdices diversas rapaces y aves acuáticas en lo que hay que destacar la zona del embalse del Val en los Fayos, y batracios.
Esta historia le ocurrió el otro día a nuestro duende del Moncayo.
Como los duendes necesitan llegar cada vez más lejos para su trabajo han aprendido a desplazarse de una manera original. Preparando dos palos los utilizan para caminar apoyando simultaneamente el palo derecho y el pie izquierdo y viceversa. Los apoyan con una inclinación y teniendo el brazo recto y un poco hacia atrás. Esta técnica se la llevó a otra tierra adonde emigró un duende nuestro hace ya algún tiempo. Se fue a Finlandia a trabajar en los bosques pues en su país había una crisis y necesitaba trabajar. Resulta muy cómodo desplazarse asi además de muy sano. Posteriormente los finlandeses bautizaron esa forma de caminar como "marcha nórdica" y lo que son las cosas ha regresado a nuestra comarca. Es un deporte con cada vez más adeptos pues es muy saludable, se fortalece el 90 % de los músculos del cuerpo y se queman más calorías que caminando.
El otro día el duende que practica marcha nórdica, se fue con sus bastones caminando desde Tarazona al pozo de los Aines en Grisel. Siguió un sendero ya señalado en el mapa.  Al principio observó que por el camino en algunos tramos circulaba agua de riego de una acequia próxima. Iba esquivando el agua como podía y continuó la marcha. Llegó a una finca en la que había perros atados ladrando y uno suelto, como debe ser que se acercaba hasta el camino a saludar.  Nuestro duende continuó avanzando pero el agua cada vez era más caprichosa a su encuentro por el sendero. En un momento determinado pensó en dar la vuelta pero el duende además de duende es maño, lo cual quiere decir que no le gusta  preguntar a alguien por donde se va a algún lugar ni dar la vuelta en un camino.
Cada vez más agua. Ahora era un pequeño río que bajaba por  una colina. Subió por el monte para mojarse menos. Llega al pozo de los Aines y decide regresar por otro camino que vuelve desde Grisel saliendo del pueblo hasta Tarazona. El camino parece estar bien pero llega la sorpresa. Otro inmenso charco atraviesa el mismo pero sigue adelante y se encuentra con una rana. Estaba en medio del camino mirándole. Pensó en darle un beso para ver si se convertía en príncipe o princesa por eso de la igualdad de género. Pero nuestro duende pensó y pensó bien. "¿y si la rana se convierte en un príncipe o princesa de los Austrias en lugar de los Borbones tan simpáticos que tenemos tan a mano y la lían entre ellos? ¿A quién defenderían los ciudadanos de este reino? ¡encima de lo que tienen los pobres borbones sobre ellos!"
El duende se despidió de la rana y continuó con la marcha nórdica camino del reino de Tarazona disfrutando del recorrido y de su deporte favorito.


1 comentario:

  1. Camina duende camina. Recorre estos mundos moncaínos y sigue deleitándonos con tus historias. Un abrazo a este duende.

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